AsteciFiesta de aniversario en Toluca

Bueno pues el día de ayer mi consultora cumplió 25 años de vida.

Veinticinco años de pagar salarios mínimos y un poco de "asimilados", 25 años de los cuales yo he compartido unos 6 con ellos, lo cual no me parece poco (aunque, si leen este blog regularmente sabrán que estos años son en dos períodos distintos).

Pero lo importante es que hoy se hace el festejo de esos 25 años, la cita, en Toluca la bella, porque los salones en donde han sido las fiestas de año nuevo tienen suficiente capacidad y también, -supongo- que porque allá tienen más gente.

Así que decidimos irnos, junto con dos compañeros me fui a la aventura: salimos del trabajo y dejamos los autos en la casa de un amigo que vive cerca, y de ahí nos fuimos juntos en mi auto.

No estuvo tan mal el camino, a pesar de que era un viernes de quincena no tardamos tanto en llegar, junto a mi iba mi amigo JAAL y en el asiento de atrás iba FMG. FMG nos había dicho que en la fiesta iban a rifar nada más y nada menos que ¡¡una casa!!, así que un poco movidos por la ambición fue como decidimos ir.

Llegamos un poco tarde, disfrutamos la cena, que como siempre estuvo muy buena, comenzó un espectáculo de tambores bastante intenso y divertido, después habló el maestro de ceremonias que se llevó más tiempo de lo que todos hubiésemos querido, dando lecciones de vida aburridas y con poco sentido, dudo mucho que el dueño de la empresa le haya pedido dar tal discurso, pero en fin, tuvimos que escucharlo.

Luego de todo eso: el bailongo, todos bailando con todas, excepto nosotros porque no es algo que nos interese, pero estuvimos divirtiéndonos a nuestra manera: platicando y haciendo puras bromas de las cosas que decimos.

Pasadas las horas nos enteramos que no habría rifa, de nada, ni siquiera de una película pirata, mucho menos de la mencionada casa, por lo que decidimos salir del lugar, pues además debíamos regresar a ciudadLaboral pues ahí residimos todos.

Durante el camino de regreso no dejamos de tachar a nuestro amigo FMG de mentiroso, pero fue en parte para molestarlo y en parte para seguirnos divirtiendo.

¡¡Mejor Suerte para el festejo de los siguientes 25 años!!

El regreso fue rápido, yo llegué a mi casa a escribir ésto rapidamente, pues mañana (bueno, en realidad en la noche de hoy) me tocará otra noche en el hospital, así que ¡buenas noches!