Viaje laboral a Morelia, Michoacan

Después de dos semanas de espera llegó al fin la ola 2.2. Así es amigos, iniciamos las olas cada 15 días y gracias al día de la independencia, esta ola esperó una semana más; pero sólo fue eso, de todos modos el plazo llegó y tuvimos que hacer nuestra cuarta ola y para mí y los que iniciamos todo nuestro quinto viaje.

En esta ocasión fuimos dos compañeras de CDMX y yo: NMT y ECC. Para este magno evento íbamos a llevar 32 equipos por lo que estábamos cómodos al respecto. El viaje que hicimos fue en autobús, así que nos trepamos 4 horitas a un autobús, eso sí, era un ETN con el cual íbamos tremendamente cómodos, aunque se retrasó un poco pero llegamos a buena hora a la terminal de autobuses; ¡¡por fin llegamos a la tierra de mis amigos BRR y JEGC!! Así es amigos, llegamos a tierra prometida. Una vez en la terminal de autobuses nos desplazamos al hotel. Este hotel no fue una cadena, como nos tocó en Pachuca o en Aguascalientes (Fiesta Inn en ambos casos), sino que le tocó el turno a un hotel llamado “Horizon”. Estaba relativamente bien ubicado, las habitaciones estaban muy bien, sin ser excelentes, tenía una mini alberca del tamaño de un jacuzzi (y estoy seguro que no era jacuzzi), pero eso sí: la comida del restaurante estaba más que excelente, un lujo. Súper recomendable, aunque supongo que se tienen que rifar porque en esta zona del país tienen comida muy sabrosa y no se pueden quedar atrás, pero eso no quita que estaba todo muy bueno.

El Centro de Ventas es uno de los más grandes que he visto, con un amplio espacio de estacionamiento y en el baño tenía hasta regaderas, pareciera que aquí sí se preocupan por su gente.

El trabajo salió relativamente bien, casi no tuvimos problemas, salvo uno que otro roce con un supervisor que quería a fuerza que se quedara un dispositivo que no tenía dueño, pero eso no podía ser así que después de negociar, me ganó y se quedó… Ni modo, órdenes de arriba, pero fuera de eso todo salió en orden.

Morelia es una ciudad que yo había visitado dos veces antes, pero ambas fueron visitas express, esta vez se junta una tercera visita express; aunque el día sábado tuvimos un poco de tiempo por la nochecita, todo el mundo nos recomendó ir al “encendido de la catedral” y eso hicimos, por cierto, llegamos rayando porque el evento ocurría a las 21:00 hrs. y nosotros nos desocupamos como 20:20, así que tomamos un Uber que nos acercó lo suficiente para llegar 20:50, a punto de empezar…

… Y el espectáculo valió la pena: iluminan la catedral, ponen música para que las luces se muevan a su ritmo y avientan fuegos artificiales, muchos más de los que yo pensaba. Antes de que esto ocurra cierran las calles principales aledañas a la catedral, para que la gente se pueda ubicar sobre la calle y pueda ver el espectáculo. Se anexa evidencia.

El domingo tuvimos la tarde libre, pero las chicas estaban algo cansadas para salir a dar la vuelta, así que nos quedamos en el hotel, disfrutamos de la enoooooorme alberca y fuimos a comprar unas chelas que nos mantuvieron aún más divertidos. Nos la pasamos destapando una cerveza tras otra, hasta que casi perdíamos la compostura, pero tuvimos que aguantarnos porque la gente de Mondeléz también estaba instalada en el hotel, por lo que mejor “nos comportamos”

Los demás días transcurrieron con normalidad, trabajamos lunes y martes, todo estuvo tranquilo, pareciera que ya estamos entendiendo todo el procedimiento.

Regresamos en un súper ETN de dos pisos, muy bonito el autobús. Llegamos a la Terminal del Norte y de ahí mis nuevas amiguitas tomaron un Uber juntas ya que viven relativamente cerca, después yo tomé mi Uber para llegar a casa.

Y una vez más aquí estoy, disfrutando una botana y una cervecita, disfrutando mi día libre y escribiendo ésto. Así que es todo pero recuerden que…

…Seguiremos destapando…