Yo soy tu padre -adoptivo-
Qué tal queridos amigos
Hoy les contaré una pequeña aventura, que me dejó con el autoestima, muy, muy arriba
Primero es necesario hacer una pequeña introducción de los personajes de la historia, resulta que la nenorra tiene un grupo de amistades en la cuadra, se trata de un grupo de mini-vándalos de entre 10 y 17 años, que durante la pandemia han hecho buena amistad; dos personajas de esa "cuadrilla" son muy amigas de la nenorra, quienes tienen las siguientes características: son primas entre ellas, de ambos padres no se sabe donde andan y cuyas madres medio las abandonaron con los abuelos, quienes son precisamente los vecinos de la nenorra, a ellos no se les ve muy "animados" cuidando a los nietos, lo cual no es criticable, pues ya se les pasó su tiempo de andar cuidando chamacos, pero bueno.
Ahora sí, estas dos personajas de la historia las conoceremos como FEN y YAN, FEN tiene 17 años al momento de la aparición de este post, mientras que YAN es sólo 4 meses más grande que la nenorra, lo cual las ha hecho tener una amistad bastante estrecha. Y como lo mencioné antes, FEN y YAN son primas y viven juntas.
Entonces el destino hizo que el día de hoy yo llevara a comer a todas, degustamos algunos platillos y dimos una vuelta rápida por una de las plazas cercanas a sus domicilios, entonces regresamos a casa de la nenorra y nos metimos todos (nenorra, YAN, FEN y yo), pero yo necesitaba hacer las compras de la semana para la nenorra, por lo que me dispuse a salir a conocida tienda departamental, por lo que existió el siguiente diálogo:
| Yo: | ¿Se les ofrece algo de la tienda? |
| Nenorra: | No |
| FEN: | ándale, dile (hablándole a su prima: YAN) |
| Nenorra: | Si, YAN, dile |
| Yo: | ¿Qué pasó? ¿Qué requieren? (Sabiendo que YAN necesita algo, pero dirigiéndome en general a todas) |
| FEN: | ándale, ya dile: ¿Pues no andas diciendo siempre que él es tu papá?. Anímate |
| YAN: | (Titubeante). Es que se nos antoja un postre |
| Yo: | OK. Les traigo algo |
Así que me salí a realizar las compras, pero en ese momento iba flotando, pues me dio mucho gusto que alguien como YAN se sintiera en confianza como para poder considerarme "su papá", aunque después de meditarlo un rato me planteé las siguientes cuestiones:
- Momento, momento. ¿A quién le dirá YAN que yo soy su papá?
- ¿Que dirá la persona que la escucha?
- ¿Lo sabía antes la nenorra?, si es así:
- ¿por qué no me lo dijo?
- ¿Sentirá celos?
- ¿Podría adoptar a YAN por medios legales?
Pero al final las dos más importantes: - ¿Su mamá sabe?
- ¿Su mamá estará de buen ver?
En fin, meditando un poco más la circunstancia me dije: Bueno, si una amiga de la nenorra me puede ver así, tal vez no estoy haciendo tan mal mi trabajo.... o tal vez lo estoy haciendo completamente mal...
Demasiadas preguntas, cero respuestas, pero por lo pronto...
... Seguiremos adoptando ...
Comentarios