Es un Sueño
Resulta que yo estaba en tierras norteñas del país, fui a visitar a la persona que tantas veces visité en el pasado en ese lugar, pero ahora todo era diferente:
Estábamos en tu casa, en una cocina bastante grande, la cocina tenía un lavatrastes que daba hacía una ventana, por la que se veía la calle, el día no estaba tan soleado, más bien nublado; yo me encontraba recargado en un mueble de la cocina y tu te encontrabas a unos dos metros de mí, platicábamos sobre cosas vanales, sin importancia, algo más o menos así:
"Sólo espera que lleguen mis papás, les dará mucho gusto verte"
"¿Y vendrá tu marido?"
"Si, pero a él no le dará tanto gusto"...
En eso llegaba tu papá, tal como lo recuerdo: alto, delgado, con canas; quién con un fuerte apretón de manos me saludaba, me decía que era un gusto verme, yo lo noté sincero...
Poco tiempo después llegaba tu mamá, con una mujer parecida a ella pero que no identifiqué, con su nieto a quién dejó sentadito en la sala; pero casi al mismo tiempo que ella llegaba también apareció el temible marido, quién estaba más molesto de lo que yo suponía que iba a estar; sin saludarme entró a la cocina y tomaba un vaso; se sirvió agua y después de tomar un sorbo o dos me encaró directamente preguntándome:
¿Tú que haces aquí?
Vine a saludar, -amablemente respondí-
Pero el sin responder nada salió de la cocina, cruzó un arco que daba hacía la sala, allí se encontró con tu hijo y se distrajo con él; entonces de repente....
¡¡¡¡DESPERTÉ!!!!
Qué sueño tan real tuve...
FIN
Estábamos en tu casa, en una cocina bastante grande, la cocina tenía un lavatrastes que daba hacía una ventana, por la que se veía la calle, el día no estaba tan soleado, más bien nublado; yo me encontraba recargado en un mueble de la cocina y tu te encontrabas a unos dos metros de mí, platicábamos sobre cosas vanales, sin importancia, algo más o menos así:
"Sólo espera que lleguen mis papás, les dará mucho gusto verte"
"¿Y vendrá tu marido?"
"Si, pero a él no le dará tanto gusto"...
En eso llegaba tu papá, tal como lo recuerdo: alto, delgado, con canas; quién con un fuerte apretón de manos me saludaba, me decía que era un gusto verme, yo lo noté sincero...
Poco tiempo después llegaba tu mamá, con una mujer parecida a ella pero que no identifiqué, con su nieto a quién dejó sentadito en la sala; pero casi al mismo tiempo que ella llegaba también apareció el temible marido, quién estaba más molesto de lo que yo suponía que iba a estar; sin saludarme entró a la cocina y tomaba un vaso; se sirvió agua y después de tomar un sorbo o dos me encaró directamente preguntándome:
¿Tú que haces aquí?
Vine a saludar, -amablemente respondí-
Pero el sin responder nada salió de la cocina, cruzó un arco que daba hacía la sala, allí se encontró con tu hijo y se distrajo con él; entonces de repente....
¡¡¡¡DESPERTÉ!!!!
Qué sueño tan real tuve...
FIN
Comentarios