Yo si Leo, Ella no Leo
Para finalizar con el drama de la vida real titulado "Yo si Leo" , concluíremos este capítulo titulado "Tu no Leo".
Resulta que el día de ayer se casó uno de mis amigos de la infancia: LVM, pero como les comuniqué el día de ayer, la sra. definitiviamente no quiso ir, por lo que, decidido a ir yo solo, me enfundé mi mejor y único traje y pedía prestado un auto para dirigirme al lugar.
En el camino pensé muchas cosas, yo había pensado en invitar a una amiga a la boda, pero algunas voces maduras y sabias me aconsejaron no hacerlo, así que después de darle muchas vueltas al asunto decidí, efectivamente, ir solo.
El camino estuvo fácil, a pesar de que la misa sería en una iglesia que no conocía, el GPS del celular me dio el poder para llegar.
Arribé al lugar con 10 minutos de anticipación, cosa que no ocurre cuando voy con la sra. (Primera ventaja a favor de ir como un lobo solitario), encontré un lugar de estacionamiento bien ubicado y me dispuse a caminar rumbo a la puerta de la iglesia, a las primeras personas que vi cuando llegué fueron nada más y nada menos que a los papás de mi amigo, con seguridad y firmeza me acerqué a ellos para saludarlos, yo iba preparado para todo, excepto para que ellos, quienes jamás habían conocido a mi esposa y sólo la conocían por una vez que les hablé de ella, me preguntarán:
¿¿¿¿Y dónde está tu esposa????
Por mi mente pasaron n-mil respuestas, tales como
- No quiso venir la condenada
- Es una hija de su flojísima
- Me vale su paradero
- Camino hacía acá en una curva pronunciada se salió por la ventanilla y no tuve tiempo de frenarme para que se volviera a subir
- Hace unos días tuvo una terrible enfermedad, que la imposibilita de salir de casa, de hecho no se puede ni mover, por eso la abandoné en casa y me vine a divertir
- ¿Cuál esposa?
- Le cae mal su hijo y decidió no asistir
- Su hijo no me dio boletos para ella... ¿No sabía?
- La abofeteé por su mal comportamiento y la castigué no trayéndola
Esteeeee.... lo que pasa es que se nos "juntaron" los compromisos, si, exacto, ya saben como nunca hay compromisos y se llegan a juntar el mismo día... ashh si es terrible, entonces tuvimos que dividirnos, ella se fue con sus hermanas y a mi me tocó venir sólo, porque para mi era muy importante estar aquí, para mi esposa también claro, pero lo que ocurrió fue que el otro compromiso era ineludible
Y así intentaba hilar una mentira buena y convincente, evidentemente sin éxito, pero fui rescatado por el sacerdote, quién se asomó al atrio de la iglesia y dijo: La misa está por comenzar, los padres de los novios favor de acercarse, y bla bla bla bla bla....
Obvio los papás de mi amigo se acercaron a la entrada y yo fui libre con mis pensamientos otra vez. Luego de que la formación accediera a la iglesia, yo procuré entrar de la manera más invisible posible, ocupando un lugar lejano y ajeno, donde nadie me volteara a ver y/o me conociera. No sé si tuve éxito, pero sentado en ese lugar se me ocurrió esta frase: Dices que sabes de la soledad, pero nunca has estado en una iglesia sintiéndote sólo, durante una ceremonia de festejo. La misa transcurrió, alcancé a ver a lo lejos la hermana de mi amigo, llamada XVM.
Salimos de la misa y platiqué un poco con ella y sus amigas. Después de las felicitaciones de rigor, me alejé discretamente de la muchedumbre y me dipuse a manejar rumbo al lugar donde sería la "recepción". Llegué sin muchos problemas, justo 5 minutos antes de que abrieran las puertas y permitieran el acceso. La entrada truinfal completamente solo a un salón de eventos sociales en donde se celebra un evento y al cual eres invitado, tiene una connotación complicada: En primera, te ves como el clásico looser, sólo me faltó llevar bajo el brazo una iPad o algo que me identificara como una persona anormal, completamente antisocial y geek.... Momento, creo que si soy un poco de todo eso, pero el coctel de bienvenida con sabor a tamarindo y un toque de tequila hizo que olvidara por un momento mi entrada solitario; hasta que, claro, encontré la mesa en donde me tocaba sentarme, pues obviamente saludé a todas la parejas que ya estaban allí, sentándome sin alguien que caballerosamente empujara mi silla.
En ese momento pensé en mi amigo JGC, sé que él me hubiese acompañado, o en mi amiga BRR, quién también pudo ser excelente compañía; pero ya ni llorar era bueno, ya estaba allí, mientras pensaba todo esto un saxofonista amenizaba el inicio del evento, los meseros comenzaban a llevar brochetitas al centro de la mesa, todo un lujo. El lugar era bastante amplio, un jardín con muchísimo espacio verde como para correr, o haber llevado a la nenorra, pero días antes cuando le sugerí a la sra. que me podía llevar a la nenorra, tuvo un arranque de ira diciendo la siguiente frase:
¿Cómo crees que te vas a llevar a mi hija????, ¡¡¡¡¡ella no sale de aquí sin su madre!!!!!
O sea que me sentí como divorciado, intentando llevarme a mi hija un fin de semana y con su madre oponiéndose como Dios manda. Olvidé todos estos pensamientos cuando al fin los novios, ahora esposos, paseaban por el lugar, los felicité, platiqué con ellos y en general pudimos platicar algunos minutos. Después las familias ubicadas en mi mesa me hicieron un poco de plática, intentaron integrarme. Yo lo hice lo mejor que pude, pero ya me conocen como soy con la interacción con los humanos... Empezó el bailongo y la sana diversión de la fiesta. Mi amigo LVM con su esposa organizó todo muy bien, todo estaba muy bonito. Poco tiempo después sirvieron la comida, que consistió en:
- Manzana con requesón (muy buena, pero para paladares de gusto fuerte, vi que mucha gente lo dejó)
- Sopa Eclipse (De queso con frijol), sabrosa, primero sirvieron la de queso, con un color amarillo fuerte, seguida de un "shot" de crema de frijol, má espesa, que se quedó en el centro del plato y poco a poco e iba revolviendo.
- Rollitos de pollo, dos, uno relleno de huitlacoche y el otro relleno de flor de calabaza
- postres, ya saben que actualmente se estilan dos, a algunos les sirvieron un pan de chocolate y a otros una tartaleta de frutas
También participé en la "víbora de la mar", obviamente cuidando al novio, ya saben como son de salvajotas las mujeres invitadas a bodas...
Y total, la noche llegaba, el ambiente permanecía de lujo, yo decidí retirarme, más a fuerza que de ganas, pues sabía que no podía llegar tan tarde a casa... ¿Cómo ven? A pesar de todo yo seguía siendo un padre de familia responsable... jajaja bueno, al menos en el pensamiento.
Y me despedí y me alejé, tomé el auto y tomé mi camino vuelta a casa, con tantas ideas en la cabeza, con pensamientos múltiples rondándome... son demasiados para plasmarlos en este blog (que además no vienen al caso), pero este día ha marcado mi vida para siempre, de eso estoy seguro....
FIN
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